viernes, 9 de noviembre de 2012

Aprendiendo a prevenir: guía para evitar lesiones en los más pequeños

De Bebesymas 
Aprendiendo-a-prevenir
Los accidentes, las caídas y los golpes son incidentes muy frecuentes en los niños. Se cree que son consecuencia de la mala suerte, pero muchas veces podrían evitarse, pues tienen más que ver con la falta de atención de los adultos que con el azar.
Para brindar herramientas útiles a los padres, Bebé Due, junto con el Hospital Sant Joan de Déu (HSJD) y elCentro Tecnológico del Juguete (AIJU) han publicado la Guía de seguridad “Aprendiendo a prevenir” para evitar lesiones en los más pequeños.
En la mitad de los casos, los accidentes que se producen en casa en los que están involucrados menores, se podrían haber evitado. Por eso es fundamental que los cuidadores cuenten con buena información para intentar reducir lesiones en los pequeños.
En “Aprendiendo a prevenir” (pdf) se ofrecen recomendaciones a los cuidadores para proteger a los niños, y consejos para evitar riesgos según su edad. Asegura que la mejor prevención es la supervisión constante del niño evitando que se exponga a ciertos incidentes que pueden conducir a una lesión.
Antes del año, los incidentes más frecuentes en los bebés son la inmersión o sofocación, seguida de los accidentes de tráfico, caídas, quemaduras e intoxicaciones. Cada año, más de 8.000 niños de entre 0 y 5 años resultan hospitalizados como consecuencia de las lesiones no intencionadas, todos a causa de lesiones evitables.
Por tanto, dado que la información es la mejor herramienta para la prevención, os recomendamos descargar la guía de forma gratuita y esperamos que os resulte de utilidad.
Vía | Peques y más
Más información | “Aprendiendo a prevenir”

jueves, 8 de noviembre de 2012

Habilidades indispensables que tu hijo tiene que aprender: trabajar en equipo.


campamento
Cuando pensamos en las habilidades indispensables que los niños tienen que aprender se nos llena la cabeza de contenidos y técnicas memorísticas, ejercicios y problemas matemáticos. También pensamos, si el niño es afortunado, en experiencias físicas y naturales.
Pero hoy quería hablaros de otro tipo de habilidades indispensables, esas que nos permiten relacionarnos con otras personas y llevar a cabo nuestros propios proyectos: vitales, laborales, de emprendimiento o de cambio. Es decir habilidades indispensables que van a condicionar como nos las arreglamos en la vida y como se nos presenta el futuro.
La primera de la que nos vamos a ocupar es de la capacidad de trabajar en equipo y os daremos también ideas para ayudar a que los niños la descubran divertidos.

Trabajar en equipo

Por supuesto, existen profesionales que van a desarrollar su actividad en solitario, pero incluso ellos, y todos, e mayor o menor medida, directa o indirectamente, en persona o virtualmente, trabajamos en equipo.
Una de las habilidades indispensables que los niños deberían ejercitar y adquirir sería la del trabajo en equipo, siempre, preferentemente, en un área de su interés y en un tema de su elección, algo mucho más positivo, enriquecedor y motivador que el trabajo externamente impuesto.
Las posibilidades son infinitas: construir una cabaña o un campamento, tocar en una pequeña orquesta, hacer manualidades en grupo, escribir una revista, hacer una pequeña película, un proyecto asociativo… y sobre todo jugar. Como veis las actividades que os propongo se salen del ámbito puramente escolar, y os voy a explicar la razón.

¿Qué falla en el trabajo en equipo impuesto?

En la escuela, muchas veces, contenidos, temas y compañeros son impuestos externamente. Y me diréis, pues mejor, como en la vida. Pero no, no lo creo, es mejor y más positivo trabajar en un equipo bien motivado, con una relación elegida y con un tema común por el que apasionarse, que cuadricularse con un proyecto que no nos apasiona y con compañeros que no nos agradan.
Cuando el equipo no está realmente unido en un objetivo de disfrute común empiezan a producirse problemas, frustraciones y tensiones. El aprender a lidiar con ellas también es necesario, pero realmente no enriquecen el aprendizaje de la cooperación verdadera.
Es el disfrute lo que hará que las habilidades de liderazgo, cooperación y enseñanza entre iguales florezcan y ese debería ser el primer objetivo del trabajo en equipo infantil.
Además, eso hará que los niños no se resignen, que sepan lo que es bueno y confien en que pueden lograrlo: trabajar en algo que aman con personas que colaboran intensa y felizmente con ellos. Creer que es posible eso ayuda a que se pueda conseguir.
La primera opción de trabajo en equipo es la que realmente les dará habilidades indispensables y tendrá frutos creativos que merecerán el esfuerzo; esa es la que puede producir un proyecto novedoso y enriquecedor para la sociedad. Y ese es el objetivo del trabajo en equipo, mejorar, no repetir ni resignarse a la mala suerte, crear cosas juntos en las que apasionarse.

El ejemplo: un campamento

La fotografía con la que he ilustrado el artículo es un claro ejemplo de trabajo en equipo. Se trata de un proyecto real, nacido de la iniciativa de los propios niños, libremente elegido y gestionado, en el que ellos mismos pusieron normas, objetivos y reparto de tareas.
Este septiembre hubo una tormenta terrible. El mar recibió toda clase de materiales de las riadas y lo días siguientes los fue dejando en la playa. Estaba sucia, imposible bañarse, ni pasear por la orilla. Toneladas y toneladas de maderas, cañas, tuberías, cajones, muebles, ruedas…
Y los niños pensaron que con todo eso podrían hacer su propio proyecto: un campamento para una tribu inspirada en sus lecturas e imaginación. Recogieron toda clase de materiales y los fueron colocando creando diferentes estructuras: tiendas para dormir, una empalizada, un ágora para sus debates, un bosquecillo de arcianos para adorar a los viejos dioses.
Entre todos tenían que acarrear los materiales más pesados, organizar la vigilancia del campamento, elegir a quien cumpliese cada función: la jefa de la tribu, el cazador, el guerrero, el chamán, la guardiana del fuego… y preparar sus expediciones de recolección. Toda una aventura que les permitió desarrollar sus habilidades de trabajo en equipo y que les enseñó mucho sobre ellos mismos y sus amigos.
Seguiremos hablando de las habilidades indispensables que deben aprender los niños. La próxima: la pasión, que es tan importante y está tan olvidada. Hablaremos de ella, pero mientras, os animo a ofrecer a vuestros hijos experiencias de trabajo en equipo lúdicas, creativas y autogestionadas.
En Bebés y más | Diez cosas que tu hijo necesita hacer¿Dejamos a los niños ser niños?La felicidad y el amor como base de la educaciónHaz de hoy un día especial para tu hijo

Habilidades indispensables que tu hijo tiene que aprender.



Hablamos ayer de lo importantes que son algunas habilidades que nuestro hijos deben adquirir y que les van a ayudar a desarrollarse plenamente y también, a conseguir su objetivos vitales, en lo personal y en lo profesional o social. Si hablábamos ayer de la capacidad para trabajar en equipo hoy lo haremos de la pasión, entendida como elegir nuestra pasión y dedicarnos a esa actividad apasionadamente.
La verdadera excelencia, entendido como hacer algo de forma extraordinaria, diferente y creativa, nace de la pasión, del amor y la entrega, del placer. Si, del placer, como motor de nuestros actos. Nos entregamos a lo que nos llena y nos hace sentir que podemos ofrecer algo personal, único y bueno. Aumenta la autoestima y la idea de propia competenciaLo bien hecho nade de la pasión.

La pasión por lo que hacemos

Y con lo dicho anteriormente llegamos a la segunda habilidad indispensable: la pasión por lo que hacemos o, mejor dicho, encontrar aquello que despierta la pasión y dedicarse a ello intensamente.
En la foto está mi hijo Héctor con los libros de ciencias que el año pasado leyó, pues es un tema que le apasiona, tanto que este año va a hacer un curso a distancia en la Universidad de Edimburgo sobre Astrobiología. Es lo que tiene seguir una pasión, te conviertes en un experto y lo disfrutas, sin más límite que el que tu encuentres en ti mismo.
Ignorar el valor de la pasión individual es quizá una de las causas del fracaso del sistema educativo español y de la insatisfacción personal en la vida adulta. ¿No os parece?
Cuando, en la escuela o, después, en la vida laboral, se intenta conseguir motivación, se ofrecen premios, compensaciones por el esfuerzo o incentivos: sean notas, caritas sonrientes, reconocimiento público, bandas, grupos destacados para los mejores estudiantes, viajes de empresa, regalos, dinero… pero el alcance de esos incentivos es limitado.

Ni premios, ni castigos

Lo que realmente hace que nos entreguemos a una actividad con un enorme interés, sacándole lo mejor que puede sacarse de ella y dándole lo mejor de nosotros mismos, con creatividad y con esfuerzo, no es el premio, ni lo es el castigo, es la pasión.
Todos hay cosas que nos apasionan y convierten el esfuerzo en profundo disfrute personal. Ese centro de interés, esa actividad, puede llegar a ser el objetivo vital y profesional, pero, desde luego, para los niños, será aquello que les haga crecer, entregarse, mejorar, aprender por el propio deseo de aprender.
Lo que los padres y educadores tienen que hacer es ayudar al niño a encontrar ese objeto de su pasión y facilitarle el que pueda explorarlo, aprenderlo y motivarse en ello: tocar un instrumento, leer sobre mitología, escribir poemas, cantar, jugar al tenis, hacer maquetas, pintar, comprender como funcionan los juegos de ordenador, diseñar espadas de madera, los animales prehistóricos, la cocina…
Pero sin nuestra ayuda y apoyo pueden quedarse entre el aprendizaje obligado y obligatorio de los libros escolares y el ocio no creativo, sin pasión. Animémosles a encontrar su pasión y a dedicarle tiempo. Es una enorme riqueza lo que esta experiencia les va a ofrecer para su desarrollo personal.

Dificultando la pasión por crear y aprender

Pero cuando elegimos las actividades y los contenidos desde fuera, y sobre todo, los hacemos obligatorio, matamos la capacidad de elegir y llega el aburrimiento. Sin embaro, cuando trabajamos desde el centro de interés del niño su energía aumenta y rebrota el deseo de profundizar y de entregarse plenamente. Ahí radica el misterio de la creatividad y de la excelencia, del interior, no de los premios.
Podemos observar en los niños pequeños esa intensa concentración apasionada cuando investigan un nuevo juguete o cuando pintan, escalan o miran un cuento. Romper ese momento es un pecado y habría que cuidarse mucho de hacerlo si no es realmente indispensable. No hay que interrumpirles. Entonces les permitimos descubrir lo importante que puede ser el trabajo mental y lo satisfactorio que es el logro personal.
Otro error, unido a las interrupciones, que es muy dañino para la pasión de los niños por el aprendizaje, escalificar su trabajo. Las cosas no están bien o mal según se cumplan parámetros, sino por el esfuerzo, la búsqueda de nuevas soluciones, la intensidad de la concentración. No es necesario decirles si han pintado bien o mal, y mucho menos calificar su trabajo si se han salido o no del margen del dibujo a colorear.

Descubriendo su pasión

Los niños nacen con una curiosidad innataPreguntan, investigan, tocan, quieren saber de todo y todo lo posible. Ese impulso nace de ellos mismos, no es externo, pero si tiene que recibir la respuesta correcta del exterior.
la pasión por un tema o una actividad, ese es el gran reto. Ofrecer al niño posibilidades de descubrimiento y dejarles explorarlas. Permitirles decidir y disponer de tiempo para entregarse a su pasión: sea la Naturaleza, la música, la pintura, las ciencias, los cuentos, el deporte, la informática… cuando a un niño algo le apasiona debemos permitirles hacerlo, sin marcar objetivos externos, sin obligar y sin juzgar.
No sabemos lo que nacerá de una pasión, pero sin pasión no se ha logrado nada nuevo ni valioso. Pero el propio decubrimiento de una pasión es ya un elemento de riqueza personal enorme, incalculable. Y por eso la pasión se trata de la segunda habilidad que los niños tienen que aprender.

martes, 23 de octubre de 2012

Curso "Gestión Societaria y Fiscal para Cooperativas",


Desde FAECTA se está realizando un esfuerzo para poder ofertar a empresas y entidades de economía social programas de teleformación dirigidos a socios/as y trabajadores/as de las mismas con el objeto de facilitar la participación en programas de formación especializada a personas que por necesidades de trabajo, por limitación de tiempo y por estar geográficamente dispersos tienen dificultades de acceso a la formación presencial.
En esta línea FAECTA pone en marcha el curso "Gestión Societaria y Fiscal para Cooperativas",
Se trata de una acción formativa encuadrada en el programa de formación continua de la  Federación. En archivo adjunto tienes disponible la Solicitud de Admisión y la Ficha Técnica de la Acción en la cual se especifican los objetivos, contenidos y calendario. El plazo para inscripción es del 23 de octubre al 9 de noviembre de 2012. Las personas interesadas en participar deben cumplimentar la solicitud que se adjunta y ponerse en contacto con la sociedad que gestiona el curso:
MARÍA DOLORES GODINO SÁNCHEZ
INSTITUTO DE ESTUDIOS ANDALUCES, S.C.A.
C/ Villanova i la Geltrú, 7
04740 Roquetas de Mar (Almeria)
950 171695 - 692 654689

sábado, 20 de octubre de 2012

Super Padres. Guía para Padres.

Elecciones a Consejo Escolar 2012/2013




1. El plazo de admisión de candidaturas será el comprendido entre los días 11 y 23 de octubre de 2012 (ambos inclusive).
Las candidaturas se presentarán en el centro docente correspondiente coincidiendo con el horario escolar.

2. La Junta Electoral hará pública la lista provisional de candidatos y candidatas el 24 de octubre y la lista definitiva el 26 de octubre de 2012.

3. La campaña electoral se llevará a cabo desde el 27 de octubre al 8 de noviembre (ambos inclusive).

4. Las papeletas de voto deberán estar confeccionadas con anterioridad al día 31 de octubre de 2012.

5. La celebración de las elecciones tendrá lugar durante los siguientes días:
a) Las elecciones del sector del alumnado, el 12 de noviembre.
b) Las elecciones del sector padres, madres y tutores del alumnado, el 13 de noviembre.

c) Las elecciones del sector del profesorado, del personal de administración y servicios y, en su caso, del personal de atención educativa complementaria, el 14 de noviembre.

6. La proclamación de candidaturas electas deberá realizarse antes del 19 de noviembre de 2012.

7. La constitución del nuevo Consejo Escolar deberá realizarse antes del 30 de noviembre de 2012.

martes, 2 de octubre de 2012

La importancia de lavarse bien las manos


Lavarse las manos es un hábito de higiene indispensable, tanto para los niños como para los adultos. Desde que son muy pequeños les enseñamos a nuestros hijos la importancia de lavarse bien las manos, hacerlo con frecuencia e incorporarlo a sus rutinas diarias.
Es un simple gesto que ayuda a prevenir la transmisión de infecciones y enfermedades, por lo tanto, además de ser un buen hábito de higiene es importante para la salud de los peques. Tampoco hay que obsesionarse, pues los gérmenes nos rodean y hasta son beneficiosos, pero las manos hay que lavarlas.

Por qué es importante que se laven las manos

Los niños no paran, lo tocan todo. Tocan el suelo, las paredes, la tierra, superficies que pueden estar sucias, mascotas, papeleras de la calle, van a baños púbicos, incluso a veces tocan chicles pegados en la vía pública… En fin, hay focos de contaminación en todos los sitios.
Por su parte, los niños suelen llevarse las manos a la boca, tocar a otros niños, incluso comen con las manos, y al tener las manos sucias pueden transmitirse millones de bacterias o virus que provocan enfermedades.
Incluso, al estornudar un niño por ejemplo, otro niño puede llegar a tocar esa saliva, llevarse a su vez la mano a la boca y contagiarse.
Según Unicef, sólo con lavarse las manos con jabón antes de comer o después de ir al baño, se podrían reducir a la mitad las muertes de niños por diarrea. Además de ayudar a reducir la incidencia de infecciones respiratorias como la neumonía, que hoy en día es la primera causa de muerte entre niños menores de cinco años.
Tan importante es que se ha establecido un Día Mundial del lavado de manos, campaña promovida por Unicef, que se celebra este mismo mes, el 15 de octubre.

Cómo deben lavarse las manos

Lo primero es facilitarles las cosas, colocando una escalera o un taburete para que puedan alcanzar el lavabo y abrir el grifo. Es preferible comprarles un jabón líquido con dispensador para que puedan colocar un par de gotitas en la palma de la mano. Idealmente, dispensador desechable, y cuidado con los dispensadores en sitios públicos, pues pueden alojar bacterias.
El lavado debe durar entre 40 y 60 segundos. Primero deben mojarse las manos, colocar dos gotitas de jabón y comenzar a frotarse las manos entre sí. No hay que olvidar limpiar la parte superior de la mano, entre los dedos, el dedo gordo de ambas manos haciendo un movimiento de rotación. Si hay suciedad debajo de las uñas, hay que limpiarlas con un cepillo de uñas que sea blandito (hay unos especiales para niños).
Una vez que estén bien enjabonadas hay que enjuagar bien las manos para retirar los restos de suciedad y células muertas. Luego secar bien con toalla, o si está fuera de casa, preferiblemente con toalla de papel de un sólo uso.
Una opción para cuando estamos fuera de casa son los geles antibacterias desinfectantes. Limpian las manos sin necesidad de agua y jabón, protegiéndolas de transmisiones.

Cuándo limpiar las manos del niño

El niño tiene que lavarse las manos con frecuencia, o hacerlo nosotros si el niño es pequeño.
Poco a poco le iremos enseñando cómo hacerlo para que vaya aprendiendo y adquiriendo el hábito. Es un gesto que deben incorporar a su vida diaria antes de comer, antes y después de ir al baño, luego de tocar tierra, haber tocado la saliva de un animal, antes de tocar a un bebé, después de haber estado en sitios públicos como un transporte, una guardería, baños públicos…. Y por supuesto, siempre que estén sucias.